¿Cuál fue la razón que te motivo a estudiar comunicación?
Parecía algo divertido. Cuando tienes 17 años, los motivos son confusos, por decir lo menos. Sabía que no quería una carrera “normal”, como mis papás (estudiaron derecho y contaduría) y, por otro lado, me gustaba escribir y era un maldito fanático del radio. Así que Ciencias de la Comunicación fue mi única opción.
¿Cuáles han sido algunos retos que has enfrentado?
Es una carrera muy amplia, que a veces, o al menos desde mi experiencia, terminas aprendiendo muchas cosas por encima. Terminé haciendo carrera en el periodismo y puedo decir que el oficio lo terminé aprendiendo ya en el trabajo y fuera de los salones.
¿Qué te apasiona de tu trabajo?
Siempre está cambiando, siempre hay algo nuevo y eso te obliga a seguir creciendo. Hoy soy editor de una revista. Me toca recibir correos y mensajes de los lectores. Ver que podemos hacer una diferencia en sus vidas, ya sea con una nota divertida o alguna reflexión que le sirva para resolver alguna bronca, es lo que más me apasiona.
Hablando de prácticas y campo laboral ¿Consideras que el extranjero ofrece más opciones que México?
Al final son ciclos y circunstancias. Hoy por ejemplo hay más opciones en México que en España y hace algunos años eso era impensable. Las oportunidades ahí están, pero hay que estar preparado para tomarlas y dar el ancho.
¿Tienes algún consejo para los jóvenes que estudian esta licenciatura?
No se queden con lo que ven en las clases, Vean, lean y escuchen todo el tiempo. ¿Te gusta la foto? Ve el trabajo de los mejores, aprende y domina. ¿Te gusta escribir? Lo mismo. Ser talentoso o que te guste hacer algo es sólo una parte, al final del día lo que hace la diferencia es el trabajo y el compromiso.
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